Un año más, nos hemos acercado hasta Zamora para acudir al festival de tapas por Zamora, que cumple su novena edición. Afortunadamente en esta ocasión, en lugar de tener que hacer ida y vuelta el mismo día, aunque tampoco es problema desde Valladolid, pudimos invadir la casa de mi hermano para aprovechar mejor la visita.
Hemos vuelto a echar en falta un mapa que ayude a localizar los establecimientos participantes, 75 este año, pero por lo menos hay una aplicación para Android, que marca los establecimientos más cercanos mostrando la distancia hasta ellos.
El precio sigue siendo el mismo del año pasado, 1,20€ por tapa, así que el límite lo marca el estómago.
Para no enrollarme más, vamos a lo que realmente importa.
Tírate el rollo: Canelón relleno de carne estofada de ciervo sobre una base infusionada con romero.
Restaurante Valderaduey: c/ Palencia, 6
Impresionante tapa para empezar. El sabor de la carne y el aroma del romero auguraban una gran visita.
No es moco de pavo: Pechuga de pavo rellena de frutos secos, jamón york y queso y envuelta en bacon. Hecha al vapor y acompañada de cebolla caramelizada.
Café Bar La Herrada: Av. Príncipe de Asturias, 45
La tapa no estaba mal, tenía buen sabor y los contrastes se agradecían, pero la cebolla caramelizada estaba algo fría y no ayudaba.
Las tres delicias: (De derecha a izquierda) El primer plato es una tartaleta a las finas hierbas rellena de pisto con anchoa. El segundo consiste en un taco de solomillo a la plancha con una salsa de foie. Y el postre sería una espuma de queso fresco con una base de miel, mango y kiwi con un toque de canela.
Bar Los Arcos: Av. Príncipe de Asturias 41
Este pequeño conjunto de tapas estaba buenísimo, y se llevo el primero de mis votos. A destacar tanto el solomillo con salsa de foie, como la espuma de queso fresco. No hay que perdérsela.
Los secretos del mar: Brocheta de pulpo, langostino y chipirón sobre una base de tosta con compota de manzana.
Café Bar QTR: Av. Príncipe de Asturias, 17
¿Qué pega puedo encontrar a una brocheta de tres cosas que me gustan? Evidentemente ninguna.
De primero la caña: Caña zamorana rellena de carrillera alistana al vino tinto D.O. Toro.
Restaurante "La Farándula" del Hotel Trefacio: c/ Alfonso de Castro, 7
La carrillera no es mi carne favorita, pero la salsa que acompaña a esta tapa, deja un gran sabor en la boca.
Super Lizarrán: Emulsión de patata y aceite con salsa brava y crujiente de jamón
Lizarrán Zamora: c/ Pelayo, 12
Tengo que reconocer que a ninguno nos convencía esta tapa en principio, pero nos llevamos una más que grata sorpresa al probarla. Hay que meter la cuchara hasta el fondo para no perder ninguno de sus matices.
Pan-To-Ja 3.0: (de izquierda a derecha) De primero tartar-gelee de pan y tomate, grisin de jamón-jamón. De segundo helado serrano, migas ibéricas, goma-oliva, tomate lyo. De postre macarrón de pan dulce de almendras, gel de tomate y jamón crujiente.
Restaurante Círculo de Zamora - La Oronja: c/ Santa Clara, 2 -1º
Esta es la tapa que resultó la favorita de todos los que estuvimos en el festival. Ya he comentado varias veces que el jamón intento evitarlo en general, pero esta tapa es imprescindible. Mi parte favorita es el helado serrano con las migas ibéricas.
Torre de Babel: Base de galleta de hojaldre caramelizada brandada de bacalao y langostino coronado con huevo hilado.
Café Viriato: c/ Viriato, 6
Me gustó esta tapa porque la combinación de sabores estaba muy lograda. Todos se notaban, pero ninguno estaba por encima del resto.
Con esta tapa terminó la hora de la comida, ya habíamos probado ocho y había que tomar un merecido descanso que, por supuesto, terminó en lo que empezaron a abrir las cocinas por la tarde.
Hamburguesa de Secreto Ibérico: Los ingredientes quedan claros.
Bar Cafelia: c/ Viriato, 3
Esperábamos encontrar la típica hamburguesita que nunca falla, pero nuestras expectativas fueron arrolladas por el gran sabor de la carne, su queso zamorano y su pan tostado. Tan rica que incluso repetimos al día siguiente.
Zamognesa: Mini pizza crujiente con salsa boloñesa elaborada a partir de productos zamoranos y huevo de codorniz.
Restaurante Ágape: Plazuela de San MIguel, 3
El mayor chasco de nuestra visita. Lo tenía absolutamente todo para emocionarnos pero, todas las pizzas tenían la base quemada. Eso sí, me comí media pizza sin la base y estaba bastante buena, pero el daño ya estaba hecho.
Risotto a la zamorana: Risotto, con tropezones zamoranos.
Restaurante La Manzana Verde: c/ La Reina, 5
El risotto me suele gustar, pero éste era especialmente bueno. Cremoso y con un gusto muy rico.
El vino y el pescao: Tartar de atún rojo marinado en soja y jengibre, con crema de cebolla y patata confitada a la plancha.
Portillo de la Traición: c/ Herreros, 6
Como esta tapa con la convicción de que me iba a gustar y así fue. La combinación de sabores es todo un acierto.
Pizzamisú: Albahaca, queso provolone, tomate y trozos de masa de pizza.
Restaurante La Bocca Di Bacco: c/ Del Aire, 5
Igual esperaba algo más de esta tapa, ya que el nombre me hacía gracia, y la pizza me encanta, pero sin duda estaba rica. Tal vez le hubiera venido mejor un sabor más intenso.
Hasta aquí dio de sí la noche. No comimos tanto como a mediodía ya que nos costó localizar alguno de los bares y la mañana había sido dura.
Trik-Trak: Pechuga de pollo villaroy con cuatro texturas crujientes y espejo de caramelo.
Restaurante Ribel (Casa Elías): Av/ Víctor Gallego, 25
La pechuga y las verduras estaban muy buenas, pero el sabor del caramelo no me convenció del todo. Si lo rozabas con la pechuga bien, pero el caramelo entero en la boca no quedaba tan bien. Exceptuando este detalle, otra buena tapa.
Zamoranito: Tapa elaborada con productos de la gastronomía zamorana.
Restaurante Patanegra: c/ Pelayo, 4
Otra tapa riquísima que nadie debe perderse. El problema fue que tardaron bastante en servirla porque el bar estaba bastante lleno. No es culpa del servicio evidentemente, pero sí se nos hizo larga la espera que, afortunadamente, mereció la pena.
Atún popcorn: Atún en tempura de palomitas y salsa de soja en reducción.
Restaurante París Qatorce: Av/ Portugal, 14
Esta tapa no dejó indiferente a ninguno del grupo. A mi no me terminó de gustar. No sé si fue la tempura o la soja, pero a los que sí les gustó, quedaron encantados.
Avisillo: Yema de huevo de codorniz, queso de Zamora y migas
Restaurante Capitol: Pz/ Santa Eulalia, 12
Otra tapa que me emocionó. Lo de arriba parece un huevo de codorniz, pero no lo es. Lo que parece clara en realidad es queso, y el toque que le da al conjunto es exquisito.
CO2 Siberian Passion: Es un combinado que partiendo del clásico cóctel "destornillador" (vodka-zumo de naranja) evoluciona utilizando el vodka siberiano "Mamont" y néctar de fruta de la pasión carbonatado por nosotros. Se sirve en dos bloques con los mismos ingredientes, uno se come, otro se bebe.
Restaurante Círculo de Zamora - La Oronja: c/ Santa Clara, 2 -1º
Para terminar la expedición, quisimos probar un cóctel bastante curioso. Primero hay que comerse la cucharita, bueno, quiero decir su contenido, y luego ya te tomas el resto con calma. Tanto la presentación como el sabor, dejaron bien claro que no nos habíamos equivocado.
Este año hemos probado algo más del 25% de las tapas, pero, en general, considero que la calidad ha subido con respecto al año pasado. Principalmente en las presentaciones. Así que nada, animo a todo el mundo que quiera hacer algo diferente a ir a Zamora y disfrutar de este festival y de su bonita ciudad.
